Ana Lilia Careaga Mercadillo, Abril de 2013
Abstract
Imagine a future in which a device connected to a computer can print a solid object. A future in which we can have tangible goods as well as intangible services delivered to our desktops or laptops over the Internet. And a future in which the everyday “atomization” of virtual objects into hard reality has turned the mass pre-production and stock-holding of a wide range of goods and spare parts into no more than an historical legacy. Such a future may sound like it is being plucked from the worlds of Star Trek or any science fiction film. However, while transporter devices or time machines that can instantaneously deliver us to remote locations may remain a fantasy, 3D printers capable of outputting physical objects have been in development for over two decades and are starting to present a whole range of new digital manufacturing capabilities. 3D printing may therefore soon do for manufacturing what computers and the Internet have already done for the creation, processing and storage of information.
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Introducción
La última vez que visité el Museo Soumaya de Plaza Carso fue durante una pausa de descanso en un “workshop” de virtualización en las oficinas de Telmex que están en el edificio de la Torre Carso. Los “workshops“ son una solución para aquellas empresas que necesitan preparar a sus integrantes para un determinado evento o escenario que sucederá en el corto plazo, por lo que la mayor parte de las empresas tecnológicas han adoptado este tipo de metodología para implementar talleres de trabajo intensivos e interdisciplinarios de temas muy concretos y precisos. Telmex no ha sido la excepción y quienes están relacionados con los nuevos productos y servicios, lo más probable es que este tipo de actividad sea recurrente en su labor cotidiana ya que es una opción extremadamente útil e interesante que inclusive, en algunas ocasiones requiere desenvolverse en otro idioma con soltura y precisión. Los “workshops” son talleres de trabajo intensivo (8 -10 horas) que buscan, no el conocimiento ni teorías rebuscadas, sino la puesta en marcha inmediata de alguna idea original, por lo que suele uno terminar con un agotamiento mental. Es por ello que no hay nada mejor que una pausa que refresque la mente y relaje el espíritu como tener contacto con cualquier tipo de arte; y fue así que, aprovechando la proximidad de tan impresionante museo, pude deleitarme no solo de su arquitectura sino de las obras de arte que guarda en su interior.
La arquitectura del Museo Soumaya [1] está inspirada en los grandes creadores de la arquitectura orgánica tanto en sus espacios internos como en sus torsiones y curvas al estilo de arquitectos como Oscar Niemeyer, Santiago Calatrava y Frank Lloyd Wright. Quizá éste último en mayor medida por su extremo parecido en su interior con el museo Guggenheim de Nueva York por la rampa que permite desplazarse de un nivel al siguiente. En su exterior, una armadura de 16 mil hexágonos de metal brillante geométricamente inmersos en su estructura da un efecto visual estilísticamente moderno pero, sobre todo, proporciona, en mi particular opinión, una geometría de curvas y superficies cuya belleza flotante le da una sensación de movimiento. Cada uno de los pisos en el museo tiene una forma distinta, y el peso del edificio es sostenido por un esqueleto de 28 columnas curvas, y siete losas de concreto que enmarcan la caprichosa forma[2].El museo está dividido en 6 plantas que albergan las colecciones de las 6 salas clasificadas temáticamente y a las cuales se recomienda acceder en orden descendiente subiendo por elevador y bajando por la rampa en espiral. Sin embargo, aunque estaba decidida a irme directo a la última sala porque se trataba de una visita rápida, aquél día opté por subir por la rampa y por alguna extraña razón me fui directo a la sala 3, la cual lleva el nombre de “Antiguos Maestros europeos y novohispanos” que contiene obras de autores barrocos y renacentistas de diferentes escuelas (flamenca, germana, francesa y española). Caminé con paso lento pero me detuve en una obra especialmente bella cuyo autor siempre me ha parecido un personaje extraño y misterioso; griego de origen pero que es considerado uno de los más grandes pintores del arte español: Doménikos Theotokópoulos “El Greco”. Aunque ya conocía la mayor parte de sus obras que se exhiben en el Museo del Prado y en Toledo (España), “La Sagrada Familia con María Magdalena y plato de frutas” me había cautivado especialmente desde que la admiré por primera vez en el Museo Soumaya de Plaza Loreto , pero en esta ocasión sentí que las pinceladas plasmadas en esta obra por El Greco se derretían en cariño, en hermosura, en amor y en meditación. Doménikos Theotokópoulos fue un pintor de estilo “manierista” que llevó a cabo una obra tan genial que aunque no creó escuela fue una clara inspiración para los pintores impresionistas y modernos. El Manierismo es un estilo que exagera la “maniera” de los artistas de la generación del Renacimiento como Miguel Ángel y Rafael pero que pone énfasis en el virtuosismo del artista en la estilización de sus imágenes. En la mayor parte de las obras manieristas, el espacio se comprime, los colores suelen ser extravagantes y las figuras son alargadas y retorcidas formando complejas posturas. Aún Miguel Ángel y Rafael, en sus últimas obras sentían un placer en la experimentación de la transgresión, desdibujando sus figuras o bien, dejando inacabadas sus obras. En “La Sagrada Familia con María Magdalena y plato de frutas”, el estilo artístico de El Greco, es una suma de todos los elementos que determinaron su formación en Grecia y en Italia, junto con la religiosidad y misticismo de la España que vivió. El color que emplea es inimitable, así como su uso libre y espontáneo del pincel que incorpora novedades que lo hacen único, sobre todo en sus típicas nubes algodonosas, sólidas y opacas. Observando esta obra, concluí que el gran arte siempre es más fuerte que las leyes de la razón y más sensato que la lógica; afirmando en cada una de sus formas, el más grande misterio, que jamás podría ser aprendido o transmitido porque es una emoción que tiene una dimensión espiritual personal.
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[1] Basado en la información disponible en http://www.soumaya.com.mx/
Después de esta pequeña “pausa espiritual”, seguí caminando hasta encontrarme nuevamente con la rampa de subida que me llevó a mi destino final: la Sala 6 “Julián y Linda Slim”, también llamada “el jardín de las esculturas” o “La era de Rodin”, ya que ahí se encuentran varias esculturas de Auguste Rodin y Salvador Dali, entre otras. Esta sala se encuentra en la planta superior y está cubierta por un espectacular tragaluz, que ilumina con luz natural las numerosas piezas de Rodin. Disponer de algunos segundos para disfrutar este espacio, es algo que primeramente recomiendo hacer porque quien crea que la escultura es algo estático, no podrá apreciar esta expresión artística. La escultura tiene movimiento tanto en su expresión como en el espectador ya que nos permite girar alrededor de ella.
El Museo Soumaya posee el acervo más importante de Auguste Rodin fuera de Francia que incluye desde sus primeras obras hasta las famosas piezas de diferente género como “La puerta del Infierno”, “El pensador”, “La mano de Dios”, “El beso” y “Las tres sombras”. [3] Obras que sin duda alguna causan especial sensación al espectador por mostrarnos no solo su genialidad sino su personalidad de hombre y artista, a veces fuerte y a veces primitiva que nos habla no solo de la transformación de la escultura sino de la vida y la verdad. Su arte obsesionado por la vida trasciende lo esencial y así, sensualidad y formalismo; erotismo y pasión, constituyen las claves de unos de los más grandes artistas de la modernidad. Dicen que Auguste Rodin es el escultor de las profundas transformaciones ya que fue uno de los artistas que más decididamente hizo los cambios necesarios para modernizar una escultura que estaba anquilosada, anclada en el academicismo. Rodin constituye un punto de partida para nuevos planteamientos, a la vez que representa a la perfección de una larga tradición que arrancaba en el Renacimiento. Pero, quizá, más allá de la cautivadora belleza de sus obras, lo más valioso actualmente es su voluntad de acercar la escultura, de acercar el arte a la vida[4]. Hacer un arte más verdadero que nos concierna a todos más directamente.
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[3] Citado en http://www.soumaya.com.mx/boletinesprensa/plazacarso/mspc_presskit.pdf
[4] Bonafoux, Pascal. “Rodin érotique:rodin et éros”
Auguste
Rodin tenía ojos azules, barba poblada y
unas manos robustas; frías como el mármol, rígidas como el bronce y rugosas
como el yeso pero capaces de desbordar pasión por la naturaleza, por el cuerpo
humano y por el arte que emerge en su obra con una sensación de hálito vital (Rivas Mercedes, 2008). Su secreto es la maestría de crear gran intensidad interior. Porque en el supremo nivel del arte, ya no hay cosas ni
objetos, contenidos ni temas, sino únicamente maestría, la que deja prácticamente secundario el tema
del mundo terrenal porque es precisamente la maestría la que “levanta” al
“sujeto” o tema a una esfera superior, la
de la perfección. Es por ello que así como los alcatraces de Rivera, las
manzanas de Cézanne o las sandías de Tamayo, los cuerpos de Rodin y todo objeto
aparentemente banal cobra intensidad a través de una dinámica superior, como si
tuvieran una presión sanguínea mayor tan
intensa que ya no podemos ver lo trivial del objeto, sino el milagro de su intensificación. Rodin es capaz de transmitirnos la belleza no ya sólo de un cuerpo,
sino también de alguna de sus partes, un brazo, una mano, un pie: la belleza del fragmento cuando encierra
ese misterio que tienen las cosas reales intensificadas con esa dinámica
superior del alma. Porque para él, su
arte antes de ser más bello quiere ser más libre, más verdadero. Es quizá
por ello que, aunque Rodin era un excelente dibujante fue principalmente
escultor. Él estaba consciente de que el
hombre necesita crear escultura como un recurso para establecer y desarrollar
su propio sentido de la existencia real, que toma de la propia
tridimensionalidad del cuerpo humano, de su volumen como espacio que ocupa en
el universo. Nuestro conocimiento de la
realidad solamente es completo cuando hemos agotado todas nuestras reacciones
sensoriales hacia ella, nuestros sentidos de la vista y del tacto están
activamente implicados en nuestras experiencias estéticas (dejando por lo
pronto a un lado el sentido del oído, básico en la experiencia musical).Y, a
pesar de que en un museo no es posible hacer uso práctico del tacto, en la escultura de Rodin es posible acariciar
el volumen e identificar su centro de gravedad coherente con la masa de
cada una de sus obras, que nos envuelve,
nos atrapa en un mundo tridimensional capaz de dar movimiento físico e
intelectual a “el pensador” o los
amantes de “el beso”.
Rodin tenía ojos azules, barba poblada y
unas manos robustas; frías como el mármol, rígidas como el bronce y rugosas
como el yeso pero capaces de desbordar pasión por la naturaleza, por el cuerpo
humano y por el arte que emerge en su obra con una sensación de hálito vital (Rivas Mercedes, 2008). Su secreto es la maestría de crear gran intensidad interior. Porque en el supremo nivel del arte, ya no hay cosas ni
objetos, contenidos ni temas, sino únicamente maestría, la que deja prácticamente secundario el tema
del mundo terrenal porque es precisamente la maestría la que “levanta” al
“sujeto” o tema a una esfera superior, la
de la perfección. Es por ello que así como los alcatraces de Rivera, las
manzanas de Cézanne o las sandías de Tamayo, los cuerpos de Rodin y todo objeto
aparentemente banal cobra intensidad a través de una dinámica superior, como si
tuvieran una presión sanguínea mayor tan
intensa que ya no podemos ver lo trivial del objeto, sino el milagro de su intensificación. Rodin es capaz de transmitirnos la belleza no ya sólo de un cuerpo,
sino también de alguna de sus partes, un brazo, una mano, un pie: la belleza del fragmento cuando encierra
ese misterio que tienen las cosas reales intensificadas con esa dinámica
superior del alma. Porque para él, su
arte antes de ser más bello quiere ser más libre, más verdadero. Es quizá
por ello que, aunque Rodin era un excelente dibujante fue principalmente
escultor. Él estaba consciente de que el
hombre necesita crear escultura como un recurso para establecer y desarrollar
su propio sentido de la existencia real, que toma de la propia
tridimensionalidad del cuerpo humano, de su volumen como espacio que ocupa en
el universo. Nuestro conocimiento de la
realidad solamente es completo cuando hemos agotado todas nuestras reacciones
sensoriales hacia ella, nuestros sentidos de la vista y del tacto están
activamente implicados en nuestras experiencias estéticas (dejando por lo
pronto a un lado el sentido del oído, básico en la experiencia musical).Y, a
pesar de que en un museo no es posible hacer uso práctico del tacto, en la escultura de Rodin es posible acariciar
el volumen e identificar su centro de gravedad coherente con la masa de
cada una de sus obras, que nos envuelve,
nos atrapa en un mundo tridimensional capaz de dar movimiento físico e
intelectual a “el pensador” o los
amantes de “el beso”.
…. El
tiempo de pausa energética había terminado ya y tenía que regresar a mi reunión
tecnológica, pero al salir me di cuenta de que ninguna otra actividad humana puede ejercitarse con tanta libertad como
la que permite la expresión artística. Apresurada, descendí por la rampa y
las imágenes volumétricas de aquellas impresionantes esculturas se iban mezclando con las pinturas que veía
en el camino. Me percaté entonces que en la pintura, el volumen es la
sugerencia de peso y masa lograda por medios estrictamente pictóricos que
reflejan características tridimensionales. Lo que sucede es que con frecuencia
resulta difícil separar y aislar nuestras reacciones visuales de las táctiles,
y demasiadas veces incluso la vista ha sustituido al tacto en la experiencia
estética. De lejos volví a ver a “La Sagrada Familia con María Magdalena y
plato de frutas” y en esta ocasión solo percibí su volumen que en sus
dos dimensiones tomaban forma tridimensional en mi mente. Concluí, entonces, que
la escultura es el arte de acariciar,
palpar, tocar y manejar los objetos y toda esta experiencia no dejaba de
estimular mi imaginación la cual me hizo sentir deseos de crear formas y de jugar, como una pequeña niña, con volúmenes y
ritmos en el espa
tiempo de pausa energética había terminado ya y tenía que regresar a mi reunión
tecnológica, pero al salir me di cuenta de que ninguna otra actividad humana puede ejercitarse con tanta libertad como
la que permite la expresión artística. Apresurada, descendí por la rampa y
las imágenes volumétricas de aquellas impresionantes esculturas se iban mezclando con las pinturas que veía
en el camino. Me percaté entonces que en la pintura, el volumen es la
sugerencia de peso y masa lograda por medios estrictamente pictóricos que
reflejan características tridimensionales. Lo que sucede es que con frecuencia
resulta difícil separar y aislar nuestras reacciones visuales de las táctiles,
y demasiadas veces incluso la vista ha sustituido al tacto en la experiencia
estética. De lejos volví a ver a “La Sagrada Familia con María Magdalena y
plato de frutas” y en esta ocasión solo percibí su volumen que en sus
dos dimensiones tomaban forma tridimensional en mi mente. Concluí, entonces, que
la escultura es el arte de acariciar,
palpar, tocar y manejar los objetos y toda esta experiencia no dejaba de
estimular mi imaginación la cual me hizo sentir deseos de crear formas y de jugar, como una pequeña niña, con volúmenes y
ritmos en el espa
Tocar es realmente la única manera por la que podemos tener una sensación directa de la forma tridimensional del objeto. Es por ello que cuando tenemos una impresión en papel de un objeto tridimensional, se hace imposible apreciar su volumen y se carece de la posibilidad de reproducir su totalidad plástica. Pero imagina, de pronto, un futuro donde un dispositivo conectado a una computadora pueda “imprimir” un objeto sólido. Un futuro donde puedas producir bienes tangibles o servicios intangibles entregados en tu laptop conectada a Internet. Un futuro donde la “atomización” de objetos virtuales los conviertan en reales y que puedas guardar en un archivo de datos las refacciones de una máquina industrial para disponer de ellas en unos cuantos minutos. Este futuro podría parecerse a Star Trek o cualquier película de George Lucas o Steven Spielberg , sin embargo, a pesar de que las máquinas de tiempo del tipo “DeLorean”[5] aún permanecen en la fantasía de la ciencia ficción, las impresoras 3D ya son capaces de “imprimirnos” objetos tridimensionales. Las impresoras 3D o 3D printers llevan más de dos décadas en desarrollo, pero finalmente podemos decir que ya son una realidad y que seguramente desencadenarán una nueva revolución industrial no solo en las capacidades del sector manufacturero, sino de la vida cotidiana, tal y como la revolución de Internet lo hizo para la creación, procesamiento y almacenamiento de la información. ¿Quieres saber más de las impresoras 3D?
Continúa leyendo….
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[5] El DeLorean DMC-12 es un automóvil deportivo fabricado por DeLorean Motor Company (DMC) entre 1981 y 1982. Fue muy conocido por su aparición como máquina del tiempo en la trilogía “Back to the Future”
Impresoras 3D: una nueva revolución industrial
Ingenieros, arquitectos y diseñadores llevan años usando impresoras 3D para crear sus prototipos, pero el abaratamiento de esta tecnología está haciendo que sea cada vez más asequible para muchos otros sectores. Los objetos 3D se crean mediante el envío de un archivo digital o imagen escaneada que se manda a la impresora que los hace realidad capa a capa, en un proceso que se conoce como “fabricación aditiva“[6].
Así como las cámaras digitales y las computadoras revolucionaron la industria y facilitaron la vida cotidiana a fines del siglo XX, las impresoras 3D están cambiando las pautas de producción y consumo de objetos tanto a nivel personal como industrial, pues permiten diseñar y armar desde prototipos industriales hasta prótesis dentales o réplicas de arte.
Desde 1995, cuando los investigadores Tim Anderson y Jim Bredt (ahora Z Corporation), del Instituto Tecnológico de Massachusetts inventaron estos productos se han hecho cada vez más populares. Ambos adaptaron una impresora convencional de inyección de tinta para obtener ya no las típicas hojas grabadas, sino objetos sólidos. Ahora estas máquinas son hechas y distribuidas por varias compañías especializadas en todo el mundo –y también en México- para que prácticamente cualquier individuo o entidad, y con el apoyo de programas de diseño, pueda imprimir capa por capa y a bajo costo prototipos, modelos a escala, piezas faltantes o refacciones de todo tipo.
El rango de objetos que esta tecnología puede fabricar se expande rápidamente; en el sector médico se usa para fabricar implantes, mientras que la industria de la moda coquetea con ella en la elaboración de prendas de vestir.
¿Podríamos estar presenciando una nueva revolución industrial? Tal parece que sí, porque si la nueva revolución industrial hace referencia a la aparición de los primeros síntomas del nacimiento de un nuevo modo de producción tal y como sucedió en el siglo XVIII con la aparición de la máquina de vapor, seguramente las consecuencias aún son inimaginables.
Pero, ¿ qué exactamente es la impresión 3D?
La impresión 3D [7]es un grupo de tecnologías de fabricación por adición donde un objeto tridimensional es creado mediante la superposición de capas sucesivas de material. Las impresoras 3D son por lo general más rápidas, más baratas y más fáciles de usar que otras tecnologías de fabricación por adición, aunque como cualquier proceso industrial, estarán sometidas a un compromiso entre su precio de adquisición y la tolerancia en las medidas de los objetos producidos. Las impresoras 3D ofrecen a los desarrolladores de producto, la capacidad para imprimir partes y montajes hechos de diferentes materiales con diferentes propiedades físicas y mecánicas, a menudo con un simple proceso de montaje. Las tecnologías avanzadas de impresión 3D, pueden incluso ofrecer modelos que pueden servir como prototipos de producto.
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[6] La Fabricación Aditiva consiste en la sucesiva superposición de capas micrométricas de material, normalmente en forma de polvo, hasta conseguir el objeto deseado. Los procesos aditivos incluyen, entre otros, todas las tecnologías de Prototipado Rápido (Rapid Prototyping) con métodos como la Impresión 3D, la Estereolitografía (SLA) o el Sinterizado Selectivo Láser (SLS). Todos los procesos aditivos tienen en común el hecho de que pueden generar geometrías muy complejas de una forma muy rápida. En todos los casos, los objetos presentan una textura material de capas muy finas, casi imperceptibles.
[7] Citado en http://es.wikipedia.org/wiki/Impresi%C3%B3n_3D
Desde 2003 ha habido un gran crecimiento en la venta de impresoras 3D. De manera inversa, el costo de las mismas se ha reducido. Esta tecnología también encuentra uso en los campos tales como joyería, calzado, diseño industrial, arquitectura, ingeniería y construcción, automoción y sector aeroespacial, industrias médicas, educación, sistemas de información geográfica, ingeniería civil y muchos otros.
Da clic aquí para saber más: http://www.youtube.com/watch?feature=player_embedded&v=X5AZzOw7FwA#!
Impresora 3D Antecedentes
Estos equipos existen hace bastante tiempo como prototipos para su uso en la Arquitectura. Producen distintas piezas de plástico, yeso e incluso de metal. Así es más fácil experimentar de forma fácil con ideas nuevas. También se pueden elaborar piezas individuales cuya producción sería demasiado cara con la forma de fabricación clásica a través de un molde de plástico.
Como en el caso de una impresora láser los datos provienen de una computadora, o más exacto de un programa CAD, con el cual tanto arquitectos como ingenieros elaboran los dibujos en su computadora. Un software divide estos modelos de CAD en capas virtuales – que luego se imprime con la impresora 3D.
Tecnologías de Impresión 3D más empleadas
Tecnologías de Impresión 3D más empleadas
La impresión 3D permite la creación de un objeto físico a partir de la introducción de un modelo tridimensional. Esta construcción puede realizarse empleando diferentes técnicas, pero las más empleadas son [8]:
- STL Estereolitografía (STL – Stereolithographie)
- FDM modelado por deposición de material fundido(FDM – Fused Deposition Modeling)
- 3DP Impresión 3D (3D Printing)
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- La estereolitografía STL es un proceso de materialización rápida de prototipos que utiliza la estratificación para la construcción de un modelo. Un programa traduce un modelo CAD 3D en formato electrónico STL utilizado por las máquinas estereolitográficas, organizando la información en capas y construyendo así el modelo. La resolución que alcanzan las máquinas actuales es comparable a las impresoras de inyección de tinta, con un grosor de 0.1mm por capa. Algunas impresoras, además de añadir material aglutinante, pueden imprimir el modelo en color. Las áreas de aplicación son inmensas; por supuesto primeramente para la Arquitectura e Ingeniería pero también para cualquier producto comercial con fines de evaluación.
- El concepto de la tecnología FDM (Fused Deposition Modeling) es la generación de piezas en 3 dimensiones por adición de material plástico en capas. El equipo utiliza material plástico ABS (Acrilonitrilo Butadieno Estireno) para construir la pieza y para generar soportes de la estructura en forma de filamento el cual es fundido una vez que atraviesa un cabezal regulador de la temperatura de fusión y va siendo depositado en finas capas en estado semilíquido hasta formar la geometría de la pieza. Depositada cada capa, la plataforma desciende para que el cabezal coloque la siguiente capa de plástico fundido, y así sucesivamente.
El siguiente es un esquema de su funcionamiento:
- La tecnología 3DP implica la creación de un objeto de forma gradual, añadiendo una fina capa en cada pasada. El dispositivo emplea un “escenario” —una plataforma de metal montada sobre un pistón— que se eleva o desciende en pequeños incrementos. Una capa de polvo se extiende a lo largo de la plataforma, y entonces, un cabezal de impresora similar a los que tenemos en nuestras casas, deposita un líquido aglomerante sobre éste, consiguiendo su cohesión. Después, la plataforma desciende de forma infinitesimal y se aplica una nueva capa de polvo, repitiendo el proceso .Con estas capas de polvo, este sistema es capaz de hacer complejos objetos. Incluso combinando diferentes polvos y uniones podemos conseguir diferentes materiales. En general, cualquier cosa que podamos construir a partir de polvos: cerámica, metales, plásticos, etc. Con los años, investigadores del MIT (que fundaron posteriormente Z Corporation) han añadido nuevas variantes a esta tecnología, incluyendo la posibilidad de incluir colores en las impresiones y utilizar diferentes materiales.
En el año 2004 Stratasys decide crear un nuevo concepto en equipamiento para Prototipos Rápidos e Impresoras 3D, y para ello desarrolla una nueva marca: Dimension. Se trata de un equipo pensado para trabajar en un entorno de oficina, sin necesidad de instalaciones especiales; preparado para recibir documentos por red y desde distintos puestos de trabajo. A la fecha hay más de 5,200 unidades de Impresoras 3D Dimension vendidas en todo el mundo, trabajando en el sector automotriz, aeroespacial, publicitario, educativo, productos de consumo, construcción ,diseño y desarrollo, militar, productos para el hogar, productos médicos y de salud, empaque, herramientas etc. Estos equipos trabajan a gran velocidad y con una óptima relación costo-beneficio, convirtiéndolos en una opción ideal para los requerimientos del mercado actual.
Para comprender mejor, puedes ver este video:
Productores de impresoras 3D : Una comparación
Cada día son más…
El área fascinante de producción de impresoras 3D y de prototipos de impresoras 3D crece rapidísimo. Antes solamente existían técnicas caras y laboriosas como la estereolitografía y sinterización selectiva del láser (otra técnica de prototipo rápido que fabrica las piezas por capas) pero ahora ya existen impresoras 3D más económicas para la oficina – e incluso para los hogares. Para todas las necesidades y exigencias hay un equipo adecuado. A continuación se describen los principales fabricantes de impresoras 3D:
3D Systems
- 3D Systems se fundó en el año 1986, headquarters en Rockhill, California , es uno de los pioneros en este campo.
- Ofrece la más amplia gama de productos en todo el mundo.
Tiene línea de productos SLA (estereolitografía), de productos SLS (sinterización selectiva del láser), y de productos SLM (fundición selectiva por láser) , así como sus materiales correspondientes
- Pero su línea de productos más estratégica es la de impresoras 3D de varios precios, y recién lanzó al mercado un nuevo modelo de impresora 3D de escritorio con un tamaño realmente interesante, cuyas dimensiones de impresión son: 28cm x 27cm x 24cm, lo que permite imprimir objetos mucho más grandes que cualquier otra impresora 3D de escritorio. La versión con 2 colores, cuesta desde 2,500 dólares, y la versión de 3 colores está en los 4,000 dólares (las impresoras 3D industriales sobrepasan los 10, 000USD). La impresora puede crear objetos con los dos principales materiales que se utilizan en las impresoras 3D, ABS y Plástico PLA al mismo tiempo. En cuanto a la resolución de impresión el mejor modelo llamado Replicator X puede crear capas de tan solo 100 micrones, y el 3D Cube de 125 micrones.
Bits From Bytes
- Equipos más económicos para principiantes
- Empresa británica
- Rango de precios disponibles accesibles por partes para armar impresora
- Más información: Bits from Bytes.
EOS
- EOS es la empresa líder en el área de SLS (sinterización selectiva del laser).Fundada en 1989.Headquarters en Munich, Alemania
- Su oferta abarca:
- Una línea de productos SLS (sinterización selectiva del laser)
- Una línea de productos SLM (fundición selectiva por laser)
- SLS y los materiales correspondientes de fabricantes alemanes
- Más información en http://www.eos.info/en
Stratasys
- Desarrolladores y dueños de la tecnología patentada FDM (Fused Deposition Modeling).Fundada en 1989, en Minnesota, USA
- También para principiantes. Las impresoras 3D Dimension son para el uso en oficina
-
- Más informacion en http://www.stratasys.com/
Z-Corporation
- Fundada en 1995 por estudiantes del MIT. Boston, Massachusetts, USA
- La mayor cantidad en opciones de colores, selección de hasta 39,000 colores.
- 5 a 10 veces más rápido que otras tecnologías. Imágenes e inscripciones se puede imprimir en color.
- Rápido y precios accesibles.
- Más información en este video:
Lo último en impresión 3D
La impresora Objet1000 de Stratasys es capaz de imprimir en 3D piezas de hasta un metro de largo. Se lanzó al mercado el año pasado y estará llegando a América Latina 2013/2014.Este dispositivo es fácil de usar, trabaja durante lapsos prolongados y será de gran utilidad para las industrias automotriz, aeroespacial y metalmecánica. Stratasys cuenta con una gama de 120 materiales distintos, que simulan las texturas y apariencia de plásticos de ingeniería como ABS o polipropileno, e inclusive hule.
Conclusiones
El arte es considerado como una actividad plenamente humana, como una manifestación cultural en la que los hombres se expresan y comunican a través de distintos medios y formas su riqueza interior; es un espacio en el que la sensibilidad es el elemento imprescindible para el encuentro consigo mismo y con los demás.
Por otro lado, la tecnología ha cambiado nuestra forma de vida, nuestras costumbres y forma de pensar. Y todo hace prever que en un futuro no muy lejano el impacto será aún mayor.
La adopción de las tecnologías de impresión 3D en entornos domésticos supone toda una revolución, ya que permite que los usuarios puedan llevar a cabo acciones que hasta ahora solo estaban reservadas a procesos industriales y profesionales. De momento, la calidad de estas impresoras se limita a objetos de tamaño medio y sin un gran nivel de precisión, y más para la realización de prototipos que objetos físicos finales. Sin embargo, el movimiento social y profesional que ha generado la existencia de estos dispositivos ha creado un nuevo mercado que puede transformar la industria y los procesos de fabricación tal y como los hemos conocido hasta ahora. Incluso en la sanidad podría tener repercusiones revolucionarias. Por otra parte, seguramente habrá otras repercusiones negativas como la propiedad intelectual y su uso indebido…. ¿Estamos haciendo lo correcto?
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